El plan, destinado a jóvenes entre 18 y 24 años para que puedan completar algún nivel de estudios, es un acto de "justicia distributiva en la juventud", y una ampliación de los derechos reconocidos desde 2003, destacó el Cedep.
En un artículo elaborado por su directora ejecutiva, Roxana Mazzola, se remarcó que la creación del Progresar "expresa una decisión del Gobierno de continuar priorizando a las nuevas generaciones que son las más perjudicadas por la desigualdad y el derrotero cultural que han traído consigo viejos paradigmas de inicios del siglo XX, de mediados de los `70 y de los `90".
Mazzola destacó que son los destinatarios del plan "quiénes van a llevar adelante y sostener una agenda más distributiva hoy y en el futuro".
El programa apunta a los jóvenes entre 18 y 24 años que no tienen trabajo o bien su salario no alcanza el mínimo vital y móvil, para que puedan completar algún nivel de estudios.
Reciben 600 pesos mensuales y la contraprestación es estudiar o realizar una formación laboral.
"Así se va ampliando la seguridad social garantizando su acceso en especial en la infancia y juventud", señaló Mazzola.
Puntualizó que "la Asignación Universal por Hijo (AUH) desde 2009 fue ampliando su cobertura a las embarazadas, a más niños, a más sectores de la población, superando inequidades".
"Ahora con el Progresar se extienden los beneficios a la juventud hasta los 24 años", indicó la experta.
Consideró que "estas medidas se articulan con un conjunto de otras acciones demostrando así que integran un nuevo paradigma a favor de la infancia, adolescencia y juventud".
Afirmó que se trata de medidas "que refieren a la ampliación del derecho a la seguridad social desde una perspectiva más inclusiva", pero también de "otras como el Plan Nacer-Sumar que garantizan la cobertura de salud".
Asimismo subrayó que el Progresar se agrega a planes como "el Conectar Igualdad, que facilita el acceso a nuevas tecnologías", pero además va de la mano con conquistas sociales como "el voto a los 16, el restablecimiento de las paritarias, la nueva normativa a favor de la erradicación del trabajo infantil, la creación de universidades públicas, por ejemplo, en el Conurbano" bonaerense.
Del mismo modo, Mazzola señaló en el mismo grupo de medidas inclusivas se debe agregar "la ley nacional de financiamiento educativo, la de salud sexual y reproductiva, y la de protección integral de los derechos del niño, niñas y adolescentes, entre otras".
Evaluó que "el aporte económico de la medida, financiada mediante el tesoro nacional, constituye un incentivo que contribuirá a que un joven pueda comprar apuntes y materiales necesarios, trasladarse a la escuela, centro de formación o a la universidad".
Al respecto, puso de relieve que las universidades "están más cercanas gracias a la política de creación de las mismas, promovida por el Estado nacional".
Por otra parte, puntualizó que la inversión del Estado "incidirá en su conjunto en las economías locales con los más de 10 mil millones de pesos que se invertirán para alcanzar a 1,5 millones de jóvenes".
"Sobre todo, lo destacable es que el Progresar reconoce el esfuerzo al estudio que miles de jóvenes realizan y los alienta a invertir su tiempo en ello", afirmó Mazzola.
FUENTE: Telam - 10/02/2014